Los textos digitales que incorporan hipertexto requieren
que lectores y escritores desarrollen nuevas habilidades, más allá de las
requeridas hasta ahora para enfrentar los medios impresos. Internet demanda
conocimiento para navegar los enlaces, para comprender las ventajas y
desventajas asociadas con tener el control de la dirección en la que se progresa
por el texto, así como para inferir y diferenciar un tipo de enlace de otro.
Nunca antes fue tan necesario que los niños aprendan a leer, escribir y pensar
críticamente, al punto que la definición de alfabetismo se ha expandido desde
las nociones tradicionales de lectura y escritura hasta incluir la capacidad
para aprender, comprender e interactuar con la tecnología de manera critica y
significativa.
Quienes empiezan a producir textos para medios en línea, se
encuentran con que este tipo de escritura resulta muy diferente a sus
experiencias previas con medios impresos. Según William Horton, “para muchos
escritores, este no es solamente un cambio de técnica si no de identidad
personal y profesional al punto, que deben aprender nuevas habilidades, asumir
nuevos roles, y redefinir sus carreras”. La hipertextualidad posee
características que demandan una nueva comprensión del texto que se lee y un
conjunto diferente de estrategias para la escritura.
Los lectores en Internet tienden inicialmente a barrer el
texto con la mirada. No leen en la pantalla, la pagina de principio a fin; por
el contrario, buscan los elementos más relevantes e imprimen entonces las
paginas que contienen esa información. Los medios en línea, además de todas las
exigencias que demandan en los lectores los textos impresos, requieren que éstos
se hagan preguntas como las siguientes: Cómo interactuar en este nuevo ambiente,
cómo navegar la información que están leyendo, cuál es su relación o su papel
con el texto y cómo asimilar el conocimiento que se les ofrece. Por tal motivo,
quienes escriben para estos medios necesitan utilizar un estilo y una estrategia
de escritura que permita a sus documentos hipertextuales ajustarse a este nuevo
tipo de lectura.
En Internet, los autores de hipertexto cumplen una función
de facilitadores, invitando al lector a construir activamente su propia ruta. El
hipertexto se convierte en un ambiente interactivo que permite al lector
recorrerlo en forma no lineal y escribir en él sus propias ideas u opiniones o
también comentarlo con el autor o con otras personas interviniendo en foros de
discusión, salas de conversación (chats), o usando el correo electrónico. Cuando
los lectores han desarrollado una buena comprensión de cuales son las nuevas
exigencias para escribir contenidos apropiados para Internet, se convierten por
una parte en usuarios más estratégicos en la forma de localizar información y
por la otra en revisores más críticos del contenido de un sitio Web.
La incorporación del hipertexto a la educación escolar
proporciona al docente nuevos recursos para la creación escrita. Actividades
como añadir, eliminar, fraccionar, asociar, reordenar y relacionar, entre otras,
se pueden promover con la escritura de hipertextos. Para Francisco García
García, director del Centro Nacional de Información y Comunicación Educativa de
España, “las nuevas tecnologías de la información han sacado partido a la
posibilidad de dividir los relatos en diversas unidades formales y de sentido,
en capturar los múltiples momentos de la historia e incluso de la acción y en
aislar los elementos espaciales que la conforman...”.